La Psicología también evoluciona
Las Terapias de Avanzada son un conjunto de técnicas terapéuticas surgidas durante los últimos años que que producen rápidos y duraderos resultados terapéuticos, a menudo en muy corto tiempo. Son tratamientos con nuevos paradigmas basados en recientes descubrimientos con respecto a las funciones cerebrales. Con las Terapias de Avanzada no sólo obtenemos velocidad, sino que también logramos una modificación apreciable en la sintomatología perturbadora.
Las Terapias de Avanzada han logrado cubrir una necesidad histórica en la psicología, en la que todavía hoy, existe un consenso generalizado, tanto en ambientes profesionales como entre el público en general, que la curación de los cuadros emocionales o psicológicos es necesariamente lenta, trabajosa y dolorosa y que se necesitan largos períodos de tiempo para conseguir algún resultado. Esto es equivalente a pensar que los adelantos en todas las áreas de la ciencia, no pudieran darse en psicología, que para algunos ha quedado estancada en los niveles de hace un siglo.
Estas técnicas se dividen en dos tipos, aunque muchas veces se combinan entre sí:
Técnicas de Integración Cerebral: que se explican por el modelo de integración hemisférica, que postula que las emociones negativas producen un desequilibrio en la sincronía de ambos hemisferios cerebrales, con una marcada lateralización derecha.
Al corregir la lateralidad hemisférica derecha logramos corregir la perturbación en forma veloz y duradera. En todas las Terapias de Avanzada los cambios en la simetría hemisférica como respuesta a los tratamientos son objetivables a través de un mapeo cerebral computarizada.
Técnicas de Psicología Energética, se explican por el modelo nervioso / eléctrico, que sostiene que un desequilibrio de los sistemas energéticos del cuerpo, y producido por cualquier motivo emocional o físico, es el causante de los síntomas perturbadores. Actuando sobre este sistema energético se vuelve a reequilibrar el sistema con el consiguiente retorno del estado de bienestar.
Ambos tipos de técnicas son de gran beneficio para:
-Estrés, ansiedad y depresión.
-Miedos, pánicos, aversiones y fobias.
-Adicciones, comportamientos compulsivos y obsesivos.
-Dolor físico y trastornos psicosomáticos.
-Facilitar el avance e integración de cualquier proceso de cambio, toma de decisiones y consecución de objetivos.
-Mejora de las funciones y el rendimiento cerebral, a nivel lógico-matemático, lingüístico, creativo, laboral y deportivo.
-Mejora de la capacidad organizativa, de aprendizaje, la atención y la concentración.
-Mejora de la capacidad de acción en situaciones difíciles y estresantes.
-Liberación y cambio de creencias negativas absorbidas durante la infancia, o instauradas a nivel social y familiar.